¿Por qué tu colega tailandés siempre dice 'Sí, claro' y luego no hay seguimiento?
¿Alguna vez te ha pasado algo así?
Con todo el entusiasmo, le presentaste una propuesta a tu colega o socio tailandés. La otra persona asintió sonriendo y, con cortesía, dijo un 'Sí, claro' (ครับ/ค่ะ, krap/ka). Y tú pensaste: '¡Excelente, ya está todo resuelto!'
Sin embargo, pasaron los días y el proyecto no mostró ningún progreso. Cuando volviste a preguntar, la otra persona te respondió con la misma sonrisa inocente. Empezaste a cuestionarte: '¿Me estarán dando el avión? ¿O de plano no entendieron nada?'
No te apresures a sacar conclusiones. Quizás no te topaste con un empleado 'poco confiable', sino que no sintonizaste el 'canal cultural' correcto.
La verdadera clave de la comunicación está más allá del idioma
A menudo creemos que aprender bien un idioma extranjero nos da la llave maestra para la comunicación. Pero un consultor intercultural de alto nivel compartió una revelación: el idioma es solo la superficie de la comunicación; la verdadera clave está oculta en la cultura.
Imagina que la comunicación es como sintonizar una estación de radio.
Tienes un radio de alta gama (tu habilidad lingüística) que puede recibir todo tipo de señales (palabras y oraciones). Pero si no sabes en qué 'canal' está transmitiendo la otra persona, lo que escucharás siempre será estática y ruido, o malinterpretarás por completo.
En Tailandia, este canal cultural fundamental se llama “เกรงใจ” (Kreng Jai).
Esta palabra es difícil de traducir directamente, ya que combina múltiples significados como 'consideración, cortesía, no querer molestar a los demás, respeto', entre otros. En este ambiente cultural, rechazar directamente o expresar una objeción se considera un comportamiento muy descortés, incluso agresivo.
Por lo tanto, cuando tu colega tailandés dice 'Sí, claro (krap/ka)', en su canal de 'Kreng Jai', el verdadero significado es:
- “Lo escuché, recibí tu mensaje.” (Pero esto no significa que esté de acuerdo)
- “No quiero hacerte quedar mal, así que primero te respondo por cortesía.” (En cuanto a si se puede hacer o no, tengo que volver a pensarlo)
- “Tengo algunas preocupaciones, pero no es apropiado decírtelas directamente ahora.”
¿Lo ves? El 'Sí' que tú creías, en realidad es solo un 'Mensaje Recibido'. Ustedes, que supuestamente hablan el mismo idioma, parecen vivir en dos mundos paralelos.
¿Cómo sintonizar el 'canal cultural' correcto?
Entonces, ¿cómo romper este 'silencio cortés' y escuchar lo que realmente piensan? Aquel consultor compartió un caso que manejó para una importante aerolínea.
Los ejecutivos extranjeros de esta empresa también enfrentaban el mismo problema: repetían constantemente 'La puerta de mi oficina siempre está abierta', pero los empleados locales nunca daban retroalimentación proactivamente. Los ejecutivos pensaban que a los empleados les faltaba voluntad de comunicarse.
Pero el consultor dio en el clavo al señalar: el problema no estaba en los empleados, sino en la forma de comunicarse.
Para los empleados profundamente influenciados por la cultura 'Kreng Jai', entrar directamente a la oficina del jefe para 'dar una opinión' era un riesgo enorme. Temían hacer quedar mal al jefe y también les preocupaba meterse en problemas.
Así que el consultor estableció un canal de retroalimentación anónimo. Los empleados podían transmitir cualquier problema, preocupación o sugerencia a través de este 'espacio seguro'. Después de que el consultor los recopilara, los presentaba de forma unificada a la gerencia.
¿El resultado? La retroalimentación llegó como una avalancha. Aquellos problemas que antes habían estado ocultos por el 'silencio' salieron a la luz uno por uno.
Esta historia nos enseña tres sencillos consejos para sintonizar:
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Aprende a 'escuchar' el silencio. En la cultura tailandesa, el silencio y la duda no significan 'falta de ideas', sino una señal fuerte que indica: 'Aquí hay un problema que necesita tu atención y solución'. Cuando la otra persona se queda en silencio, lo que debes hacer no es apresurarla, sino crear un ambiente más seguro y, de una manera más sutil, entender sus preocupaciones.
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Crea un 'espacio seguro'. En lugar de pedir a los empleados que 'sean valientes', es mejor construirles un puente seguro. Ya sea un buzón anónimo o designar a un intermediario, la clave es que sientan que expresar sus ideas genuinas tiene 'cero riesgo'.
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No dependas de una sola fuente de información. Si solo te informas a través de tu traductor o secretario/a, es muy probable que la información que recibas haya sido 'filtrada' y 'maquillada'. Sal proactivamente y establece contacto con personas de diferentes niveles y departamentos para armar el panorama completo. Así es como realmente se entiende el mercado, en lugar de vivir en una burbuja de información.
El idioma es el punto de partida, la conexión es el destino final
Al final de cuentas, el objetivo final de aprender un idioma no es para añadir una línea más de habilidades a tu currículum, sino para establecer una conexión real y profunda con personas de otro mundo.
Dominar solo el vocabulario y la gramática es como aprender solo a teclear sin saber cómo navegar por internet. Pero entender la cultura es el cable de red que te ayuda a conectarte a internet y ver el vasto mundo.
Claro, antes de sumergirnos profundamente en cada cultura, necesitamos una herramienta para iniciar la primera conversación. En el pasado, la barrera del idioma era el mayor obstáculo, pero ahora, una aplicación de chat inteligente como Intent integra potentes funciones de traducción por IA que te permiten iniciar conversaciones fácilmente con personas de cualquier rincón del mundo. Rompe la barrera lingüística inicial por ti, dándote la oportunidad de construir una red de contactos más amplia y experimentar de primera mano esos detalles culturales que no se pueden aprender en los libros.
La próxima vez que te prepares para entrar en un nuevo mercado o colaborar con socios de diferentes orígenes culturales, por favor, recuerda:
No solo preguntes '¿Qué dijeron?', sino, más importante, '¿Qué no dijeron?'
Cuando puedas entender el lenguaje detrás del silencio, habrás dominado el verdadero arte de la comunicación intercultural.